Calentamos el agua (4 litros) con una cucharada de aceite, podemos agregar sal o consomé de pollo. Cuando empiece a hervir, agregamos las láminas de pasta y mezclamos un poco solo para separarlas. El agua debe de cubrir la pasta.
Dejamos cocer aproximadamente 7-8 minutos o hasta que la pasta este suave. (Mientras puedes ir picando los vegetales que vamos a utilizar para el relleno).
Pasado este tiempo, escurrimos y separamos.
Calentamos el horno a 375F o 190 C.
Para el relleno.
Calentamos un sartén, agregamos aceite de oliva y freímos la cebolla y el ajo, hasta que la cebolla quede acitronada (transparente).
Incorporamos la carne molida y freímos.
Agregamos la media taza de vino o agua, una lata de la salsa de spaghetti, el albahacar, sal, pimienta y bajamos el fuego, dejamos hervir. Retiramos del fuego.
Aparte, engrasamos un refractario rectangular, agregamos la mitad de una lata de salsa de spaghetti para cubrir el fondo del molde.
Acomodamos las láminas de lasaña, haciendo capas. Colocamos una capa de lasaña, una parte de la mezcla de carne, queso ricota queso parmesano. Repetimos hasta que terminemos con la pasta.
Encima de la última capa, agregamos salsa de spaghetti.
Tapamos con papel aluminio y metemos al horno por treinta minutos.
Sacamos del horno y cubrimos con queso quesadilla y agregamos cualquier queso que haya sobrado.
Metemos al horno sin tapar por cinco minutos o hasta que gratine o derrita el queso de encima.
Sacamos del horno y dejamos reposar por cinco minutos antes de servir, para que no se desbarate.